Gravísimo: director del INRED sabía del robo del aires y no lo habría denunciado

Una gravísima omisión se habría presentado en el INRED, pues, al parecer, solo hasta después de ser consultados por Seguimiento.co, fue que el director del Inred, Armando Otero, habría tomado la decisión de denunciar el hurto de la maquinaria de aire acondicionado en el polideportivo de Santa Marta, los cuales están avaluados en aproximadamente $1.000 millones de pesos. 

Así lo estableció el medio local Hoy Diario del Magdalena, que, al ver la denuncia de este medio digital, amplió la información consultando a la Fiscalía Seccional del Magdalena, donde les confirmaron que "el caso apenas empezará a investigarse por parte del CTI ya que solo hasta en horas de la tarde (del miércoles 20 de septiembre), el funcionario encargado del Instituto INRED se hizo presente para elevar la respectiva denuncia penal". 

Justamente al mediodía del miércoles, este medio de comunicación digital había abordado al director del INRED para preguntarle sobre el robo que se perpetró hace por lo menos 4 meses y del cual no se había informado nada a la opinión pública. 

La respuesta del directivo fue que ya se había interpuesto la debida denuncia, pero al pedirle copia de la misma, Otero negó la solicitud y pidió que se comunicaran directamente con la oficina de Comunicaciones. 

Lo cierto es que este hurto es una gravísima situación, debido a que para la época de los hechos, el personal que atiende los escenarios de la Villa Bolivariana (o Polideportivo) había sido reducido ostensiblemente, de unas 40 personas a 15. 

Además, es preocupante el hecho de que la alcaldesa Virna Johnson no hubiera hecho público esto teniendo en cuenta que con este hurto, varios de los escenarios deportivos cerrados (como las canchas de raquetas) quedaron sin uso debido a la falta de aire acondicionado. 

Según fuentes consultadas por Seguimiento.co, para cometer este robo, los criminales tuvieron que acceder con camiones y tardarse varias horas o incluso días en poder desmontar todo lo que se han hurtado, pues no solo han sido los aires sino también gran cantidad del sistema eléctrico con el que se iluminan los escenarios deportivos.