Empresario barranquillero entregó declaraciones sobre su extraño secuestro

El empresario Fito Acosta habló tras haber sido liberado por sus captores, luego de haber sido secuestrado el viernes en la mañana, cuando se movilizaban en su camioneta blindada con su esposa, quien fue dejada en libertad en horas de la tarde de ayer mismo. El empresario llegó hoy en un taxi hasta su casa sólo.

“Muchas gracias al Gobierno Nacional, a la Policía Nacional, al alcalde de Barranquilla, al General (Botero), al grupo Gaula y todas las autoridades competentes que hicieron que todo esto fuera posible y a mi esposa y a mis hijos”, dijo el empresario.

“Fueron momentos difíciles, pero siempre controlado y llevando la calma. No dejando presionar por nada y todo salió favorable”, indicó también.

Sobre la exigencia de dinero para su liberación, el empresario señaló que al principio sí lo hubo.

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“Todos esos detalles si serán directamente con el Gaula de la Policía, pero afortunadamente todo eso es una felicidad. Todos estamos en paz aquí en la casa”, dijo.

Acosta aseguró que nunca fue sacado de Barranquilla. Cree él que siempre lo tuvieron retenido en los alrededores del barrio La Pradera.

“Yo creo que siempre estuve en Barranquilla, por los lados de La Pradera. Me liberaron en un barrio por allí cerca. Me dieron 20 mil pesos para un taxi y como buen cristiano lo cogí”, dijo.

El empresario también aseguró que el viernes en la mañana cuando lo retuvieron a él y a su esposa ocurrió cuando hubo un falso retén de la Policía. Eran cuatro personas de civil y dos que estaban uniformados de policías, según indicó, y se bajó de su camioneta blindada. Esto fue aprovechado por los presuntos secuestradores para lograrlo reducir.

Causa extrañeza esta explicación, ya que una persona que se moviliza en un carro blindado sabe que solo puede bajarse del vehículo, cuando es requerido por las autoridades, en una estación de la Policía.

También ha causado curiosidad en la redes sociales es que el empresario llegó solo a la casa y después apareció con un chaleco del Gaula con la palabra ‘rescatado’.