Ya parece paisaje: vuelven a 'tumbar' a turista en Barú con precios exorbitantes

Cartagena suele ser el destino favorito de muchos turistas nacionales y extranjeros para visitar durante las vacaciones y recorrer las maravillosas playas y lugares que ‘La Heroica’ posee. Sin embargo, hay una situación que ha venido empañando la experiencia que tienen los visitantes en esa ciudad.

Los cobros excesivos, y la malicia con que muchos vendedores y comerciantes utilizan para ‘tumbar’ o cobrar de más a los turistas, está dando una mala imagen de la ciudad y de eso, ya se están dando cuenta las personas.

Este fue el caso de Mario Rafael Rodríguez, un bogotano que acostumbra visitar Cartagena dos o tres veces al año junto a su familia, para descansar y hacer diferentes actividades.

Por eso, luego de la típica celebración de fin de año, decidió ir este jueves 2 de enero a Playa Tranquila, ubicada en la Isla Barú, junto a su esposa, sus dos hijos, su suegra y una prima que llegó hace dos días de Bogotá, para compartir un momento agradable y relajarse en el mar.

Todo iba bien hasta que, cuando iban llegando a su destino, muchos jóvenes se les acercaron para ofrecerles servicios de almuerzo y actividades acuáticas y su prima, quien iba conduciendo de primera, decidió aceptar los servicios de uno de los vendedores.

El afectado y denunciante le indicó a Seguimiento.co que “el muchacho nos dice que nos va a dar todos los servicios, y cuando estábamos en Playa Tranquila ya eran como las 2 de la tarde y pedimos el almuerzo pero yo me acordé de una denuncia que había salido en una emisora de Bogotá el año pasado entonces le dije al muchacho que me dijera los precios antes”.

Indignación del turista por un almuerzo de $593.000

Las sospechas de Mario sobre presuntos cobros excesivos que tenía en el ojo del huracán a los vendedores de Cartagena y que había escuchado y leído tiempo atrás en medios de comunicación, se hizo realidad.

De acuerdo con el denunciante, el menú solo muestra los diferentes platos pero no tienen los precios ya que estos los dan los mismos vendedores, situación que hizo dudar aún más al turista bogotano.

Tal y cual como lo denunció el hombre en su cuenta de Twitter, al finalizar el almuerzo con su familia, se llevó la sorpresa de que el costo total era de $593.000, igual que en los restaurantes más finos de Miami y otros lugares del mundo.

La foto que le tomó el turista colombiano a la cuenta que le dieron en el restaurante deja ver que, por los 3 pargos rojo que pidió, cada uno a $75 mil, le cobraron $225 mil; por 3 mojarras rojas que cada una cuesta $45 mil, le cobraron $135 mil.

La familia pidió además un pollo que les costó $35 mil, dos piña coladas, cada una a $30 mil para un total de $60 mil; 4 cervezas, cada una a $7 mil, para un total de $28 mil; 5 gaseosas por un total de $30 mil, y finalmente el servicio o la propina que era de $80 mil.

Es el colmo que en Playa Tranquila en Barú se sigan aprovechando de los turistas se dieron garra cobrando la factura por favor ayúdenme a RT por qué no puede seguir pasando esto. pic.twitter.com/wRCddCa3xh

— MARIO RAFAEL (@MARIORAFAEL) January 2, 2020

Sobre estos precios, que si bien, concuerda el valor unitario de cada producto con la suma total, el denunciante le señaló a este medio digital que, la cifra fue muy elevada y que además, cuando ellos solicitaron los precios antes de hacer el pedido, estos eran unos y en la cuenta, les aumentaron la cifra de cada alimento y bebida.

Asimismo, Mario Rodríguez aseguró que si bien, sabía que el almuerzo no iba a salir muy económico ya que estos días son de temporada alta y los precios suelen aumentar, además de ser Cartagena un destino muy apetecido y turístico y los vendedores deben ganar algo por su trabajo, considera que la mala fe y las burla del joven que los atendió fue lo que más le molestó.

Versión del turista sobre la mala experiencia que tuvo

Mario además aseguró que, luego de quedar sorprendido por la cifra tan alta del almuerzo, dijo que “a mi prima le cobraron una picada de 220 mil pesos. Pero eso nunca pasa nada, uno ni siquiera puede grabar un video a esa persona porque es que no es uno solo, son muchos, incluso en la kazeta del lado había cinco o seis más que estaban sentados burlándose de lo que habían cobrado en la factura de nosotros”.

“Yo estaba en el mar con mi hijo menor y mi esposa pidió la cuenta y como se demoró tanto yo me devolví para ver qué era lo que había pasado y cuando vi la cuenta eso no concordaba porque al principio nos habían dado unos precios y al final eran otros y aparte la propina eran 80 mil pesos”.

Finalmente, el hombre aseguró que pagó la cuenta pero no incluyó el servicio, además, indicó que no pudo quejarse sobre dicha situación pues en esa playa no había presencia de la Policía.

“Estás lejos de la ciudad, habían muchos vendedores, es difícil no pagar y tampoco había presencia de las autoridades”, dijo el hombre.

Finalmente Mario contó que lo llamaron la Policía de Turismo de Playa Tranquila y le pidieron el nombre del vendedor, a quien le dicen Jean Paul, pero aseguró que la situación murió allí.

Rodríguez dijo que este tipo cosas hay que denunciarlas “porque no es la primera vez que yo vengo, yo conozco Cartagena y es la primera vez que me pasa esto”.

Finalmente, pese a haber tenido esta mala experiencia junto a su familia, por precios elevados que asegura no se relacionan con la calidad de los alimentos y bebidas, aseguró que le encanta Cartagena y aunque no dejará de visitar la ciudad, tendrá más precaución y no solicitará los servicios de los vendedores o comerciantes en las playas pues señala que estos se aprovechan de la buena fe de las personas y los precios son excesivamente caros.

Esta no es la primera vez que turistas nacionales y extranjeros se quejan a través de las redes sociales por los precios exorbitantes que finalmente le da una mala imagen a la ciudad y afecta principalmente a los mismos vendedores y comerciantes.