Fuerte oleaje derribó el enrocado que protegía la vía Santa Marta – Barranquilla

La furia del mar derribó en las últimas horas la barrera de rocas que protegía la vía Santa Marta – Barranquilla, a la altura de los kilómetros 19 y 20.

Las olas acabaron con el enrocado que tenía más de dos metros de altura, dejando aún más vulnerable al tramo vial. Por ello, para evitar una situación más compleja, la concesión Ruta del Sol II y el Instituto Nacional de Vías (Invías) trasladaron a varias maquinarias para instalar relleno en los puntos críticos.

El periódico El Tiempo informó que ingenieros detallaron que hubo una pérdida de playa y material de contención que dejó expuestos aproximadamente unos 120 metros lineales de la carretera.

Los profesionales de la ingeniería también manifestaron a ese medio que al menos 40 metros quedaron en condiciones graves por la amenaza del mar que está muy cerca del talud de la vía.

La movilidad se redujo a un solo carril y toda el área afectada permanece señalizada para que los conductores tomen precauciones. De igual manera, operarios de la Ruta del Sol hacen presencia las 24 horas para atender cualquier novedad.

Vale recordar que Invías estableció meses atrás un plan de intervención a la zona, que contempla tres fases.

La primera consiste en la intervención y protección marginal de la vía para recuperar la seguridad e integridad del corredor en el km 19; la segunda corresponde a la construcción de un enrocado multicapas de 1,4 kilómetros de longitud y la tercera, la construcción de dos viaductos de 4,8 km y 2,9 km en la altura de los kilómetros 19 y 28, respectivamente.