“Suficiente daño ha causado”: padre de Miguel Uribe pide a Petro apartarse del caso

El precandidato presidencial Miguel Uribe Londoño solicitó a Gustavo Petro mantenerse al margen de la investigación por el asesinato de su hijo, el senador Miguel Uribe Turbay, quien falleció en agosto tras sobrevivir dos meses a un atentado ocurrido en junio.

La declaración fue hecha a través de su cuenta de X, donde expresó su inconformidad con las intervenciones del jefe de Estado en el caso. “Le exijo a Gustavo Petro apartarse del caso de mi hijo Miguel. Suficiente daño ya ha causado”, escribió.

La Fiscalía General continúa liderando el proceso judicial, en el que hasta el momento hay siete personas señaladas de estar involucradas en el crimen. A pesar de ello, Petro ha emitido declaraciones públicas en las que sugiere posibles móviles del asesinato, sin presentar evidencias concretas, lo que ha generado molestia entre los familiares del senador fallecido.

Controversia por intervención legal

La controversia se intensificó tras una denuncia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), presentada por el abogado Alejandro Carranza en nombre del presidente Petro y su hijo Nicolás. En el documento se advertía sobre una supuesta utilización política del homicidio de Uribe Turbay.

Ante esto, la firma Víctor Mosquera Marín Abogados, que representa a la familia Uribe, respondió señalando que dicha acción constituye un intento de desinformar y desviar la atención pública de las investigaciones en curso contra Nicolás Petro, quien enfrenta procesos por lavado de activos, enriquecimiento ilícito y otras irregularidades contractuales.

“Este tipo de afirmaciones revictimiza a una familia que ha perdido a un hijo, esposo y líder político. Lo ocurrido es un atentado directo contra la democracia, no una herramienta para construir narrativas políticas”, afirmó el bufete en un comunicado.

Hipótesis sin sustento

El presidente Petro ha ofrecido varias teorías sobre el crimen en distintos escenarios públicos. En una de ellas, mencionó posibles vínculos con el negocio de las esmeraldas, mientras que en otra planteó la presunta participación de mafias con presencia en Europa. Ninguna de estas versiones ha sido respaldada por las autoridades encargadas del caso.