Denuncian al nuevo presidente de la SAE por acoso sexual: chats lo incriminan

Viviana Vargas Ávila, asesora del Ministerio del Interior, ha presentado una denuncia ante la Fiscalía General de la Nación contra Diego Cancino, actual presidente de la Sociedad de Activos Especiales (SAE) y exviceministro del Interior, por presunto acoso sexual.

Según el testimonio de Vargas, los hechos ocurrieron el 9 de octubre durante una reunión en el apartamento de Cancino, a la que fue invitada para discutir posibles oportunidades laborales, ya que su contrato estaba próximo a finalizar.

En su denuncia, Vargas Ávila relata que lo que comenzó como un encuentro profesional se tornó inapropiado cuando Cancino intentó besarla y tocarla sin su consentimiento. Vargas había acudido acompañada de su hija, quien se retiró poco después, y al sentirse incómoda con la actitud del exfuncionario, decidió contactar a dos amigos para que la acompañaran y evitar que la situación escalara.

A pesar de los intentos de Vargas por establecer límites claros, Cancino continuó con sus avances inapropiados. La situación se mantuvo tensa hasta la llegada de los amigos de Vargas, quienes fueron testigos de cómo Cancino seguía haciendo comentarios personales y aproximaciones físicas no deseadas.

La denuncia también incluye pruebas de mensajes de WhatsApp, que fueron revelados en exclusiva por la revista Semana. Estos intercambios muestran a Cancino disculpándose tras los presuntos hechos. En uno de los mensajes, el exviceministro le escribió a Vargas:

"Te ofrezco sinceras y profundas excusas. Perdóname. Mi comportamiento estuvo mal y claramente no debí haber actuado así. Te escucho y asumo las claridades que pones. Jamás voy a confundir los límites claros que me expresas. Eres una mujer y ser hermosa. Perdón".

En su respuesta, Vargas deja claro su malestar y la gravedad de la situación:

"A mí esto me duele mucho Diego, porque trabajamos juntos y te veía como un amigo. No entiendo cómo me confundiste, porque en ningún momento te di alas para que te sintieras con la confianza de hacer algo así".

A pesar de las reiteradas disculpas de Cancino, quien añadió:

"Perdóname, por favor. Nunca fue mi intención hacerte sentir mal, de verdad lo lamento. Te mando un abrazo", Vargas continuó expresando su confusión y descontento.

En un intento por mitigar el impacto de sus acciones, Cancino insistió en que no quería que lo sucedido afectara su relación laboral o de amistad:

"Te reitero mis excusas. Me dejé llevar y no debí haberlo hecho. No quiero que esto afecte nuestra relación laboral ni mucho menos nuestra amistad. Si lo deseas, podemos conversar cuando te sientas lista".

No obstante, Vargas fue contundente en su respuesta final:

"No quiero tener ningún tipo de relación contigo, ni laboral ni personal. Lo que hiciste fue irrespetuoso y no lo voy a pasar por alto. Ya he tomado la decisión de denunciarte y espero que entiendas lo grave que fue lo que hiciste".

Estos mensajes han sido presentados como parte de las pruebas que sustentan la denuncia de Vargas contra Cancino, y son clave en el proceso judicial que avanza en su contra.